El Real Madrid empieza la Champions League con una merecida victoria frente al Unión Berlín. Fue Bellingham en el último minuto (sexto gol del inglés en seis encuentros) el que consiguió el gol de la victoria, para dar los primeros tres puntos al Madrid en el estreno de la competición.

En la primera parte del encuentro el duelo fue más parejo. Los de Ancelotti recuperaban el balón a gran velocidad pero no llegaban al área rival con claridad, gracias al buen trabajo defensivo del conjunto alemán.

La segunda parte fue bien distinta, el dominio y las ocasiones de gol eran del conjunto blanco. Joselu y Rodrygo especialmente tuvieron una buena cantidad de ocasiones, pero entre Ronnow, la madera y la falta de precisión de nuestro equipo parecía que la victoria se esfumaba, o que se resolvería en los minutos finales.

Y así fue, cuando parecía que el partido iba terminar empatado apareció Bellingham de nuevo, para volver a demostrar que los minutos de añadido son su territorio.

El inglés sentenció al aprovechar un rechace tras un disparo de Valverde desde la frontal para sellar la merecida victoria de nuestro equipo, desatando la locura en el coliseo blanco.